Este lugar es un súper atractivo turístico, ya que lo acondicionaron para ser un sitio original en el que cuentan con: puentes colgantes, un tren de acceso, escaleras, miradores, escenificaciones de la actividad minera, mitos y leyendas, iluminación especial y una discoteca, llamada "El Malacate" la cual es considerada como única en su género, y a la que llegas a través de un túnel de 600 m., por el Socavón La Esperanza , para lo que se aborda un pequeño tren cuyo destino es el corazón de esta mina, vale la pena que visites este sitio tan peculiar.
Pero en Zacatecas también puedes disfrutar de muchas otras actividades como ir de compras, ya que encontraras magnificas piezas en plata y cantera; además hay magnificas prendas bordadas, cinturones piteados, piezas en hierro forjado, entre muchas otras artesanías.
Algo de lo que no te puedes perder si visitas este hermoso lugar son las famosísimas Callejoneadas Zacatecanas o también conocidas como Tamborazo Zacatecano, es un recorrido musical que se realiza por las noches en los callejones de la Ciudad. Esto comienza más o menos así: Las personas se juntan alrededor de la banda, generalmente compuesta por entre ocho y 10 músicos que inician su fiesta nocturna con melodías de la región. Pero previamente se entrega a los participantes unos jarritos que tienen una cinta amarrada a la "oreja", lo cual facilita que se cuelgue el jarrito como collar, para así asegurarse de no perderlo en el recorrido y poder gustar del mezcal minero que uno de los acompañantes de la banda se encarga de llevar para repartir en cada uno de los "descansos".
Está tradición nació con los Barreteros a principios del siglo XVII. Los mineros trabajan por pareja, uno sentado sosteniendo la barreta y el otro parado golpeando con el martillo. El sonido del martillo y la barreta dan origen al deseo de reproducir estos sonidos en un instrumento. Conseguida esa primera parte, le ponen música, lo que da como resultado el "Tamborazo". Luego, los instrumentos de trabajo se comenzaban a usar el sábado por la tarde, como forma de distracción, al juntarse varios amigos, después de cobrar la raya. Unos visitaban a otros y de allí se iban a casa del hermano, compadre o primo, recorriendo hasta el amanecer las calles y callejones de Zacatecas, claro si no terminaban antes encarcelados.
