México Lindo y Querido
México Lindo y Querido
La gente de Concá cuenta que la actual campana de Jalpan fue hecha a finales del siglo XVIII en una provincia de España con oro y plata llevados de México. Los sonidos que emitía eran tan armónicos y dulces que el rey mandó colocarla en la torre de la Catedral de Madrid; permaneciendo ahí por muchos años. Pero ocurrió un día de septiembre de 1810 que la campana repicó sola y más alegre que antes.
La imagen del Señor de las Misericordias, Santo Patrono de Tlalnepantla, fue regalada por el rey Carlos V a Hernán Cortés, quien a su vez la donó al convento de San Francisco, de México.
Don Lorenzo de Baena, hombre bondadoso y sencillo, poseía una considerable fortuna. Pero ocurrió que un día la mala suerte entró en su casa, y desde entonces las calamidades se sucedieron en una serie ininterrumpida.
El domingo 7 de marzo de 1649, en la ciudad de México, por el palacio del arzobispado, los habitantes vieron pasar una mula, en la que iba montado un indígena y éste sostenía a un caballero para que no se cayera.
En el año de 1566 arribó a México, Don Álvaro de Villadiego y Manrique, hombre joven y refinado, quien venía como miembro de la comitiva que acompañaba al recién nombrado Virrey, Don Gastón de Peralta. Fastuosa fue la entrada en medio de la algarabía que la presentación del excelentísimo provocaba y por su elegancia, en medio de la pompa, Don Álvaro resaltaba.
Había terminado Dios de presenciar el diluvio que duró cuarenta días y cuarenta noches. En el techo del mundo tenia reunidos a sus hijos predilectos, a quienes salvó de la inundación.
La actual 5 de Febrero en el Centro histórico de la Ciudad de México, en el tramo desde la esquina de Republica de El Salvador hasta Mesones, se denominó desde la época colonial hasta las primeras décadas del siglo XX, con el nombre de La Calle de la Joya y aquí te cuento por qué se le conocía con ese nombre.
